miércoles, 16 de junio de 2010

calificar

Acción de determinar las cualidades de alguien, a veces, cómo en esta ocasión, de uno mismo.
Se pregunta si de verdad esto es una razón para velar el sueño. Tiene claro que la respuesta es negativa ya que calificar y recalificar han devenido acciones banales más aun cuando dichas cualidades han de traducirse en cifras de representación ridícula o lo que es peor, en palabras de significado ambiguo que tienen pretensión de hablar desde la complacencia (traducibles todas ellas en forma numérica). 
La «nota», la calificación siempre fue un medio, no un fin, incluirla en un ejercicio final acostumbra a denotar mal gusto. Llevarla más allá del trámite administrativo es prácticamente un falta de respeto al trabajo realizado (aunque cabe determinar también si dicho respeto existió alguna vez).

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